Un puñado de renacentistas, entusiastas que comparten las ganas de dibujar, el pan, el vino. Las múltiples formas de dejar huellas impresas. La ilusión de construir una forma, un color, una profundidad sobre el desierto blanco y plano. Sabiendo que no fue ni es magia la batalla cultural frente a la rapiña organizada, su coacción, su balbuceo ignorante de cinismo vulgar, sus ganas de rematarlo todo y fugarse.
Así firmes, para desconcierto y enojo de los traficantes, con nuestros oficios, nuestras pasiones, nuestras labores y deseos, los trabajos y los días hacen que no valga la pena el querer, hacemos que valgan la alegría.
¿Qué son un puñado de palabras?
3 de enero de 2018 (palabras escritas en lápiz -y transcriptas)
Por Alfredo Aguirre
